La Responsabilidad de Nuestras Vidas

Recientemente mirando una entrevista de Warner Erhard en la cual el habla sobre la pobreza en la india y las responsabilidades de las personas sobre su vida y su destino, me hizo entender y cambiar mi manera de ver las cosas. Este señor nos dice una frase “al que tiene hambre hay que darle la responsabilidad de su propia hambre, tenemos que ensenarles a las personas que son responsables de su miseria”, esto suena muy duro porque nos han enseñado que se debe tener compasión por los necesitados, que hay que ayudar al prójimo, pero lo que no comprendemos es que cuando victimizamos a las personas les colocamos una etiqueta, le damos un papel del cual no lograran salir.

En el momento en que  les damos la responsabilidad a las personas sobre su vida le estamos dando la oportunidad de hacer algo para cambiarlo, de tomar acción y obtener resultados. Dejar atrás el papel de víctima y asumir el control sobre su propio destino.

Muchas veces dejamos de buscar la solución a los problemas que se nos presentan y nos concentramos en buscar a los culpables de esa situación y así perdemos la perspectiva. Lo que hay que buscar se encuentra en nuestro interior, somos creadores de nuestro propio destino, nada de lo que ocurre afuera debe cambiar nuestra esencia. En vez de buscar culpables debemos concentrarnos en responsabilizarnos por lo que nos ocurre, porque lo que tú hagas respecto a lo que te sucede es lo que va a crear la acción para poder salir de allí.

Bill Gates el famoso empresario nos dice: “nacer pobre no es tu culpa, pero morir pobre si lo es”. Tenemos el poder de cambiar nuestra realidad.

No se trata de no ayudar, ni colaborar con quien nos necesite ni volvernos personas egoístas con los que nos rodean, se trata de no menospreciar las capacidades que todo ser humano tiene de cambiar sus circunstancias.

La vida es un juego en el cual tu escoges que ficha quieres ser, puedes sentarte a esperar que otro te ayude o  puedes ayudarte a ti mismo y entender que el poder está en tus manos. Resulta mucho más gratificante el sabor de la victoria cuando nos esforzamos por obtenerla a cuando simplemente esperamos que nos den el trofeo sin haber hecho nada para merecerlo.

La adversidad es necesaria para el cambio porque alguien que no se enfrenta a dificultades no tiene la motivación que lo impulse a querer más y a cambiar su realidad. Existen muchos ejemplos de personas que han enfrentado situaciones que muchos no podemos ni imaginar vivir y han salido victoriosos y eso ha sido únicamente por su espíritu de lucha.

No podemos poner en las manos de nadie nuestra vida, nuestros problemas, nuestras luchas porque todo lo que nos toca vivir es nuestro solamente. Nadie puede vivir por ti así como nadie podrá morir por ti. La responsabilidad de tu vida es intransferible.

Somos responsables de lo que nos ocurre y no hay que asumirlo  como culpa, sino como una posición o una actitud. Esta actitud te da el poder de hacer algo al respecto. No eres una víctima, eres el responsable.

Tairon Aguilera


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